Rubby Chirivi, madre de la candidata Dayanna Perilla, reina del barrio Crespo, aseguró en la W radio que las jóvenes recibieron insultos, palabras obscenas, comparaciónes y amenazas promovidas por funcionarios del Ipcc.
La madre también aseguró que en las jornadas extensas de práctica, no les daban nada de comer ni de beber, ni si quiera ir al baño, ya que si salían estárian fuera del concurso, y aseguró que una candidata hasta se desmayó.
Así mismo contó un percance que le sucedió a su hija en una competencia, le llegó su periodo y no le permitieron ir al baño, “mi hija terminó saliendo al desfile en estas condiciones tan denigrantes, afortunadamente tenía una falda larga y no se notó”. Así mismo comentó unos recursos de 5 millones, recursos que a la hora no les han llegado ni se han pronunciado.
Ante esta crítica y otras más que han surgido después de haber culminado el reinado de independencia de Cartagena, el concejal Javier Bejarano, aseguró que desde el Concejo le hicieron seguimiento a estas fiestas de independencia.
“Le hicimos este control porque el IPPC tomó la decisión que a través de contratación directa contratar con Plaza Mayor de Medellín la logística y ejecución de las fiestas por un valor de 2.500 millones de pesos. Esto generó críticas en la ciudad porque como es posible que una fiesta de Cartagena sea ejecutada por una empresa de otra ciudad”.
Ante estas irregularidades el concejal decidió radicar ante la Contraloría una auditoria especial para que se revise los contratos que firmó el IPPC para el tema de las fiestas. Además, de una queja ante la Procuraduría por las faltas inhumanas a las concursantes del reinado de la belleza.