Nuevamente se ha tocado un caso que sigue impune, se trata de la masacre que tuvo lugar en la emblemática Torre del reloj el 13 de febrero de 2003 cuando a las 12:15 de la madrugada Betsabit Espitia, de 27 años; Lourdes Lara, de 20; Ofelia Correa y Heidy Smith, ambas de 17 años, quienes ejercían la prostitución fueron asesinadas por dos sujetos que llegaron en una moto, la estacionaron en el Camellón de los Mártires, uno de ellos se bajó, llegó donde estaban sentadas y descargó su arma sobre ellas.
Ahora, Uber Banquez Martínez, alias Juancho Dique, exjefe del bloque Héroes de Montes de María de las Autodefensas Unidas de Colombia, quién fue condenado a ocho años de prisión por la masacre de 11 campesinos y el desplazamiento de 300 familias en Mampuján, el 10 y 11 de marzo de 2000, afirmó en un diálogo con El Tiempo:
“Yo ordené la masacre de cuatro mujeres en la Torre del Reloj de Cartagena. Ese crimen se dio por orden mía, en medio de la limpieza social de esa época, personal bajo mi mando lo hizo, y yo acepté el hecho ante la justicia”. Actualmente Banquez busca a los familiares de las víctimas para ofrecer perdón público.
El hoy abogado y gestor de paz también expresó su arrepentimiento por cientos de crímenes ocasionados por la limpieza social que acosaba a los barrios de Cartagena, dejando víctimas como habitantes de calle, trabajadoras sexuales, drogadictos y jóvenes LGBTI; cuyos cuerpos, en muchos casos, fueron arrojados al Canal del Dique.
“Hoy pido perdón por este hecho a las familias de estas jóvenes y por los crímenes por la mal llamada limpieza social que pudimos haber cometido en barrios como Olaya Herrera, Pozón, la Candelaria, La María, Bazurto y Nelson Mandela, entre muchos de Cartagena”.
Informes señalan que la masacre habría sido pagada a los paramilitares por un empresario de la ciudad quien aseguraba que la jóvenes usaban escopolamina para robar turistas.
