La farmacéutica Novartis ha presentado un avance destacado en la lucha contra el colesterol alto con su medicamento Inclisirán, comercializado como Leqvio, en fase de pruebas en Europa. Se basa en tecnología de ARN similar a la de las vacunas contra el Covid-19 y muestra prometedores resultados en la reducción del colesterol “malo” (LDL) en pacientes con enfermedades cardiovasculares.
El origen de este descubrimiento radica en la mutación genética del gen PCSK9, que dos mujeres tenían, permitiéndoles mantener bajos niveles de colesterol perjudicial sin requerir una dieta estricta. Esto llevó a la creación de Inclisirán, un fármaco administrado mediante inyecciones semestrales, que inhibe la producción de PCSK9 en el hígado.
En ensayos clínicos con miles de pacientes, Inclisirán ha demostrado una impresionante reducción del 54% en los niveles de LDL en individuos con enfermedades cardiovasculares, con efectos secundarios leves. El Ministerio de Sanidad autoriza la financiación de este tratamiento en casos de alto riesgo donde otros métodos no reduzcan los niveles de LDL por debajo de 100 mg/dl, aunque existen preocupaciones sobre el límite económico establecido.
Los estudios en curso buscan determinar si Inclisirán puede reducir la mortalidad a largo plazo y revertir la formación de placas de ateroma. A pesar de que su uso generalizado aún necesita tiempo, este avance farmacéutico ofrece una esperanza significativa en la lucha contra el colesterol alto, un importante factor de riesgo para enfermedades cardíacas.
