Esta es la historia de Sandra del Pilar, una mujer que se encuentra recluida en la cárcel El Buen Pastor, de Bogotá, a la que le impusieron una pena de 14 años luego de comerse un pollo asado y no pagarlo, lo que calificó como hurto y la llevó a su detención.
La mujer en diálogo con el noticiero City TV, contó los motivos por los cuales tomó la decisión de tomar el producto alimenticio sin pagarlo. “Me llaman del colegio del niño a decirme que se había desmayado, y yo sé que él se desmayó por hambre”, sostuvo.
Después de haber tomado el pollo, los guardias de seguridad se dieron cuenta del hurto, la abordaron y la llevaron a una bodega, donde procedieron a llamar a las autoridades. “Me llevan a la parte de seguridad, llega la Policía y me dicen que me tengo que ir para la unidad de Paloquemao”, indicó Sandra.
Luego de eso fue dejada en libertad y se dedicó a emprender para llevar el sustento a su hogar. Sin embargo, después de un tiempo, la mujer fue nuevamente arrestada junto con su esposo.
Sandra recibió la notificación de un llamado a 13 años y 8 meses de prisión al parecer por el delito de hurto y por la utilización de menores para efectuar el robo.