En un suceso que ha captado la atención de la comunidad, las autoridades de Cali han liberado al individuo implicado en el intento de venta de una piel de oso polar en el barrio Centenario. A pesar de su liberación, el individuo sigue siendo objeto de una investigación en curso por tráfico de fauna, delito que conlleva graves consecuencias legales en Colombia.
La piel en cuestión está siendo sometida a un minucioso análisis en la Universidad del Valle, donde se espera que se determinen su autenticidad y origen. Este análisis podría proporcionar información crucial para las autoridades, permitiéndoles desentrañar la compleja red de tráfico ilegal de especies exóticas en el país.
El individuo detenido ha afirmado desconocer la ilegalidad de su acción, asegurando haber recibido la piel de un familiar fallecido. Esta situación ha generado interrogantes sobre cómo la piel llegó a Colombia y ha resaltado la importancia de fortalecer los esfuerzos para combatir el comercio ilegal de vida silvestre.
A medida que la investigación continúa, las autoridades instan a la colaboración ciudadana y reafirman su compromiso con la protección de la biodiversidad colombiana.