Además de la inhabilitación de Machado, Estados Unidos había exigido previamente a Venezuela levantar restricciones a otros miembros de la oposición, relajar prohibiciones y liberar a presos políticos. A pesar de gestos previos destinados a allanar el camino hacia la reconciliación, como la liberación del empresario colombiano Alex Saab, la situación se ha complicado nuevamente. La incertidumbre sobre el futuro de Venezuela se intensifica, especialmente con detenciones y acusaciones que enrarecen el clima político.
Tensiones recíprocas y advertencias entre ambos aaíses
La reimposición de sanciones ha desencadenado tensiones y advertencias recíprocas entre Estados Unidos y Venezuela. Horas antes de esta medida, el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, indicó que futuras decisiones dependerán de las acciones de Maduro. Este enfoque sugiere una estrategia de “esperar y ver” por parte de Estados Unidos antes de determinar si aplicará más medidas restrictivas. La respuesta firme del gobierno venezolano, advirtiendo de severas consecuencias ante nuevas sanciones, aumenta la incertidumbre sobre el curso de las relaciones bilaterales.