Un servicio de policía de forma permanente como una vez tuvieron, es el clamor que hoy hacen de los comerciantes organizados que prestan su servicio en el monumento de las botas viejas.
Los vendedores dicen estar preocupados por la frecuente cantidad de hurtos e inseguridad del sector, generada por delincuentes que se movilizan casi siempre en motocicleta y que han puesto en riesgo la integridad de varias personas.
“Este es un punto muy visitado por el turista que se transporta en chivas, aquí nosotros ya hemos tenido que reaccionar muchas veces ante la imposibilidad contar con un apoyo policial oportuno. Creemos que teniendo al menos un uniformado acá podremos mejorar la respuesta. Hoy también tocamos la puerta del distrito para que se acuerde que este es un atractivo de la ciudad”, aseguró Robinson Ferreira, propietario de un establecimiento.
Pese a que el cuadrante del CAI San Lázaro hace sus rondas, el gremio expresó que se quiere es fortalecer la presencia institucional y sobre todo, no exponer al turista
