Esta historia tiene como protagonistas a los brasileños Mamédio Alves, de 105 años, y Ana Araújo, de 100 años, quienes estaban casados desde 1940 y fallecieron el pasado viernes 30 de junio en Paraná, Brasil, con un intervalo de cuatro horas entre cada uno.
La pareja es un fiel ejemplo que el amor es duradero cuando se encuentra a la persona indicada y la demostración al mundo entero que ni la muerte puede separar esa conexión.
La mujer padecía de Neumonía, y de acuerdo con relatos de familiares cercanos a medios de comunicación, los médicos no le dieron esperanzas de vida debido a su avanzada edad y la gravedad de la enfermedad, por lo que fue enviada para morir en casa junto a su marido.
Tras la situación, Mamédio que estaba completamente sano dejó de alimentarse y su salud se complicó. El jueves 29 de junio fue internado en un hospital y murió a las 4:00 de la madrugada del día siguiente. Sin enterarse de lo sucedido, Ana falleció en su residencia a las 8:00 de la mañana.
La pareja no tuvo hijos, pero ayudó en la crianza de familiares y niños en la zona rural donde vivieron. La Alcaldía de Paraná confirmó el hecho y pidió “fuerza y unión en este momento de luto”.
