El tenista español, reunió ayer a todo su equipo en una cena celebrada en su casa en el barrio de Wimbledon, ha anunciado este jueves que no estará en condiciones de afrontar la semifinal de mañana ante Nick Kyrgios.
“Tengo una rotura en el abdominal”, dijo el español en una rueda de prensa convocada de urgencia en el All England Club. “Tengo una rotura en el músculo. Tengo un riesgo importante de empeorarlo. Llevo todo el día y casi toda la noche de ayer dando vueltas a la situación. Finalmente he llegado a la conclusión de que aquí solo me vale ganar, el resto no me sirve de mucho. Es prácticamente imposible pensar en ganar dos partidos de este nivel con un abdominal roto. No tiene sentido intentarlo. Si sigo la lesión va a ser peor”, añadió.
Confirmó que el periodo de baja puede ser de tres o cuatro semanas y que, si todo va bien, en una semana podría estar entrenando desde la línea de fondo. Su objetivo es llegar a tono para el Masters 1.000 de Montreal, que se disputa del 5 al 14 de agosto, y que le serviría de preparación para jugar el US Open, al que, curiosamente, llegará invicto en los Grand Slams, con 19 victorias y cero derrotas, algo que solo ha conseguido en la Era Abierta Novak Djokovic, cuando lo logró la temporada pasada.
Luego de practicarse una ecografía y una resonancia magnética, supervisada por su médico de confianza, Ángel Ruiz Cotorro, se conoció que el tenista sufre una rotura que le impide seguir en la competición.
De esta forma se despide de la opción de completar el ‘Grand Slam’ en una misma temporada.
